Este

Uno de esos lugares a los que se llega en búsqueda de otros. Y es que, cuando se llega a la Playa los Machos en Ceiba, uno no se imagina que caminando un poco más encuentra este rinconcito escondido cubierto de aguas turquesas y arenas blancas que lo convierten en un must para quedarse y contemplar Vieques a la distancia. El acceso es a través de Playa los Machos, estacionate en esta playa y camina algunos cinco minutos hasta llegar a Playa Medio Mundo.

Al noreste de Culebra se encuentra una playa de arenas blancas y aguas cristalinas que, aunque de belleza comparable con Flamenco, tiene un beneficio a su favor: no es tan visitada. Si bien las playas de la Isla Chiquita son conocidas por todos, existen espacios como este, perfectos para tomar el sol, leer algún libro o simplemente descansar. ¿Se puede pedir más? Lleva todo lo que necesites para tu día de playa, ya que no hay tiendas cerca.

Ideado para satisfacer el gusto de cada paladar. Y es que este foodtruck encuentra la inspiración para cada plato en los diferentes tipos de personas. Es por eso que su cocina puede viajar de lo astiaco a lo italiano, lo mexicano, y hasta comida vegana, en solo un segundo, ofreciendo variedad gastronómica de arroz y fideos que no decepcionará. Reta tu paladar con platos que jamás has probado o dale ese comfort food que tanto te gusta.

Restaurante en Ceiba que une el arte y la elegancia para crear platos al estilo pop art y vintage.

Si andas con un grupo de amistades, saca el tiempo para hacer una caminata a Charco el Hippie, una piscina natural con piedras grandes de donde te puedes lanzar al agua. Es perfecto para refrescarse y montar un picnic en la orilla. Localizado en Naguabo, debes verificar las condiciones del tiempo antes de tirarte el trip ya que es uno de los pueblos donde más llueve en toda la isla.

Cuando toca, toca. El chapuzón en Charco Frío es necesario para revivir y refrescarse. Tómate tu tiempo con ese spot ya que se encuentra ubicado en el Rio Fajardo, donde también están Las Tinajas, una serie de charcas que son parte del río. Rodeado por vegetación y con un día soleado, una visita a este charco no te va a fallar.

¡Lo de aquí sabe mejor! Joshua y Glendaly lo tienen muy claro. Por eso, han creado una empresa familiar enfocada en la siembra y venta de productos agrícolas. Sus opciones de cajas vienen llenas de diversas frutas, vegetales, hortalizas y hasta pan sobao. Contáctalos por teléfono para ordenar tu caja y lleva los mejores productos de nuestra tierra hasta tu casa.

Satisface cualquier antojo del paladar en este restaurante ubicado en las montañas de Naranjito. Un espacio bohemio e intimo, perfecto para refrescar alma y paladar.

En el mismo Charco de las Pailas, en Luquillo, se encuentra esta segunda chorrera de unos treintas pies. Para llegar tienes que subir un área de rocas que se encuentra a la izquierda de la chorrera más corta que mide unos 15 pies.