El verano de Bad Bunny: “Todo esto superó mi propio sueño” 

Con un mensaje de amor y de lucha, Benito Martínez concluye su histórica residencia con la bendición de Andrés Jiménez “El Jíbaro”, la visita de Jacobo Morales y el anuncio de una 31ª función este fin de semana.

“Esta ha sido la mejor experiencia que he tenido en mi vida… Todo esto superó mi propio sueño”.Benito Antonio Martínez Ocasio, 14 de septiembre, función 30 de la Residencia “Yo no me quiero ir de aquí” 

El verano de Bad Bunny empezó el 11 de julio, día de San Benito, y creíamos que había culminado el 14 de septiembre con el concierto número 30 de su histórica residencia “Yo no me quiero ir de aquí”. Pero como él mismo dice, en Puerto Rico todo el año es verano, así que la experiencia nos marcará para largo y cerrará, finalmente, el 20 de septiembre con “Una más”, un concierto adicional que realizará en el octavo aniversario del huracán María.  

Bad Bunny generó un impacto económico de entre $379 millones (según un análisis de Advantage Business Consulting, ABC), y $713 millones, de acuerdo con Gaither International. Con más de 600,000 visitantes extranjeros y una treintena de invitados —tanto para cantar como para asistir a la casita—, convirtió la “temporada baja” en uno de los veranos más prolíficos en términos económicos y artísticos.

Transformó la forma de hacer eventos en el Coliseo de Puerto Rico José Miguel Agrelot y nos recordó el orgullo de ser boricuas, no importa dónde estemos.  

Los 400,000+ boletos para los 30 conciertos de la residencia de Bad Bunny se agotaron en solo 4 horas. Foto por Brandon Cruz para PlateaPR.

La experiencia no solo superó las expectativas del cantante urbano.

También hizo que otros artistas que participaron de la residencia quedaran embelesados por el poder del Conejo Malo, al punto de que el cantautor Andrés Jiménez “El Jíbaro” le echó su bendición, asegurando que sus ancestros están orgullosos de su legado porque es “un boricua de corazón”.  

“Óyeme, Manuel Alonso, (Luis) Palés Matos, Luis Lloréns: Aquí está Benito Antonio, él es un jíbaro también. Montó su guaritiquén y tiene al mundo embrujado con la bomba, con la plena y un cuatro bien tocado. Los ancestros borincanos le echan la bendición para que siga cantando y siga poniendo en alto su bandera y su nación. ¡Coño, despierta boricua!”.

Andrés Jiménez “El Jíbaro” , tras interpretar Lo que le pasó a Hawaii en la función 30

Desde afuera se siente el orgullo boricua

No hubo un fin de semana en que las afueras del Choli no fueran una gran fiesta celebrando a Bad Bunny y la puertorriqueñidad, con comida típica, actividades variadas y mucho perreo, bomba y plena.

Al booth del Sapo Concho, se le sumó uno sobre las variedades del coquí puertorriqueño, por lo que la concientización ambiental también se sintió.  

“Hay un refrán que dice: Para que no me cuenten, yo voy a estar presente. Y yo creo que esto es algo histórico. No se sabe si vuelva a pasar o no va a pasar. Apoyando al puertorriqueño Bad Bunny y, aparte, confraternizar”, dijo a Platea Capuchino Torres, de Guaynabo, quien no tenía boletos, pero fue con dos amigos para disfrutar del jangueo en las afueras del Coliseo, algo que muchos hicieron durante el periodo de la Residencia.

Los vendedores ambulantes se fueron multiplicando a medida que avanzaba la residencia y, en el último wikén, vendían banderas de diversos países, mercancía con la cara de Bad Bunny y hasta imitaciones de las tenis del artista.

El propietario de My Restaurant La Lechonera, Miguel Velázquez. Foto por Brandon Cruz para PlateaPR.

“Ha sido muy buena la acogida. Todo el mundo está encantado con el servicio, con el lechón, que es lo importante… Nos vamos siempre con el carretón vacío. Todo lo que traemos, todo se vende”, dijo a Platea Miguel Velázquez, propietario de My Restaurant La Lechonera, uno de los quioscos que vendió comida criolla en el Trocadero, frente al Choliseo.  

De igual forma reaccionó el dueño de No Manches, César Cano, que estaba en otro de los quioscos de Trocadero. “Se vendió todo. El movimiento de la gente fue increíble… Puerto Rico tiene y puede ofrecer bastante en cuestión de turismo y atraer gente de muchísimos lados”, dijo Cano.  

“(El evento) es otra cosa. Representa lo que somos, la isla y nuestra cultura. Es algo que va a superar, va a seguir permanente por siempre porque la verdad es que ha hecho historia”, opinó Kenny Pérez, de Vega Alta y uno de los asistentes a la función 30.

Su amigo, Jan Medero, de Canóvanas, agregó: “Nos ha puesto a Puerto Rico en alto. Han venido muchos turistas y eso es bueno para nuestro país”.  

Gio, una turista mexicana, contó que el impacto que tuvo la residencia en ella y sus amigos fue “conocer Puerto Rico, su cultura, su gente y estamos bastante emocionados de todo lo que está por venir”.  

El concierto: el party de marquesina más grande de Puerto Rico  

Desde la fila, la emoción se sentía. Contrario al primer wikén, que solo había boricuas, en el último se escuchaban acentos variados y había banderas de México, Colombia, Panamá, República Dominicana y más. “Mencionan a Puerto Rico y ya yo estoy llorando”, le decía una chica a su amigo mientras esperábamos para entrar.  

Foto Getty Images

Vestido con un pantalón crema, camisa blanca, un gorro ushanka y guantes de nieve, Bad Bunny inició el concierto a las 8:30 p.m. con
“ALAMBRE PúA”
, luego de que Julio Gastón, director musical de la residencia, buscara su tambor y llorara al encontrarlo, emocionado por tratarse —hasta ese momento— de la última función.

“Cuando mi tambor suena, Borinquen, Puerto Rico, mi isla, mi pueblo de Loíza se pone contento”.

Julio Gastón durante la interpretación de ALAMBRE PúA. 

Le siguieron versiones fusionadas de bomba de “KETU TeCRÉ”, “EL CLúB” y “La Santa”, con bailarines con ropa típica danzando por la montaña, la emblemática tarima del concierto. Tras el solo de cuatro de José Eduardo Santana, Benito interpretó “PITiRRO DE COCO” y “El apagón”.  

Y entonces salió un video de Jacobo Morales en una casita de madera en medio de un bosque nevado diciendo: “Seguimos aquí. Mi alma y mi corazón siguen aquí y donde tú y yo estemos es la casa. Y donde sea que yo vaya, soy y seré puertorriqueño. Y eso nadie me lo puede quitar”. 

A pesar de la distancia y del frío, el veterano actor nos recordó: “Aún de lejos, se puede estar presente y amar y sufrir y defender. Mira a Hostos”.

Entonces, junto a Concho, observando una foto de su playa boricua favorita, salió un Bad Bunny con ropa veraniega —pantalón corto de cuadros blancos y rojos y una guayabera— e interpretó “WELTiTA” junto a Chuwi, el grupo isabelino que participó de todas las funciones luciendo atuendos de diversos diseñadores boricuas.  

La banda de Isabela, Chuwi estuvo presente durante toda la Residencia interpretando WELTiTA. (Foto: Suministrada)

Le siguieron versiones de “KLOuFRENS” y “BOKeTE”. Y luego de que Benito cayera por el boquete de la tarima, salió el corazoncito triste de Un verano sin ti. Debajo del flamboyán, cual joven descorazonado, Bad Bunny se puso un pantalón largo e interpretó versiones acústicas de “Si estuviésemos juntos”, “Ni bien ni mal”, “Vete” y “TURiSTA”.  

Luego, volvimos a ver a Concho recordando su casita y llamando a Bad Bunny para preguntarle qué ha sido de ella.  

Y por primera vez, llegó Jacobo Morales a la casita y se fundió en un abrazo con Benito. Entre los gritos de la multitud, que anticipaba que era hora del perreo, Bad Bunny interpretó “NUEVAYoL”, “Tití me preguntó”, “Neverita”, “Si veo a tu mamá” y “La Romana”.

El artista urbano caminó detrás de la casita, donde escogió a una mujer para gritar el clásico: ¡Acho, PR es otra cosa! Trepándose en el techo, interpretó “VOY A LLeVARTE PA PR”, “Me porto bonito”, “Bichiyal”, “Efecto” y “Safaera”.

Para “VeLDÁ”, salieron Dei V y Omar Courtz, perreando hasta abajo en la casita. Benito cerró el perreo con “EoO”, demostrando cómo se baila en Puerto Rico. Los Pleneros de la Cresta, presentes en las 30 funciones, interpretaron con él “CAFé CON RON” y luego “Ábreme Paso”.

Tras apagarse la casita, apareció nuevamente en video Jacobo Morales en medio de la nieve. Se levantó, puso la foto de la playa favorita en una caja de madera, cerró la caja y se la puso bajo el brazo y salió al bosque. Caminando con un bastón por un camino nevado —un contraste con los paisajes del Caribe—, se encontró frente a frente con Julio Gastón y su tambor, y le dijo: “Por favor, nunca dejes de tocar tu tambor”.  

Luego de la secuencia, la voz de Bad Bunny junto al tambor de Gastón nos decía: “Si mil veces volviera a nacer, mil veces escogería nacer aquí en esta tierra».

Su mensaje resonó con orgullo boricua – el deseo de que futuras generaciones puedan cumplir sus sueños sin tener que irse, reconociendo las voces que han defendido a Puerto Rico por generaciones y asegurando que siempre las habrá. 

“Nos toca a nosotros, puertorriqueños y puertorriqueñas, defender nuestra tierra, nuestra cultura, nuestros montes, nuestros ríos, nuestra esencia, lo que es nuestro. Boricua, nunca dejes de tocar tu tambor, no importa en qué parte del mundo te encuentres”.

Bad Bunny previo a la interpretación de Lo que le pasó a Hawaii, en la función 30

“LO QUE LE PASÓ A HAWAii”, que han cantado Kany García, Pedro Capó, Ednita Nazario y otros tantos, en la función 30 le tocó al orocoveño Andrés Jiménez “El Jíbaro”, que bautizó a Bad Bunny como un “jíbaro también” y le dio la bendición de los ancestros.  

Y tras un video de El Búho Loco (Néstor Galán) de los orígenes de la salsa, salieron Los Sobrinos a interpretar “Callaíta”, “BAILE INoLVIDABLE” y “DTMF” en versión salsera.  

El mensaje de unidad de Bad Bunny  

Benito se despidió del público con un emotivo mensaje en el que agradeció no solo a su familia y a sus fanáticos, sino a todos los que hicieron posible los 30 conciertos de la residencia.  

“Esta ha sido la mejor experiencia que he tenido en la vida. Gracias por tanto. Cuando desde chiquito soñaba con hacer esto, sabía que todo lo que trabajara con cariño, con pasión, lo podía lograr, pero todo esto superó mi propio sueño. Gracias por tanto amor. Gracias por tanto cariño. Gracias por ponerme aquí», expresó el artista.  

Foto por Brandon Cruz para PlateaPR.

Aprovechó la ocasión para enviar un mensaje de amor y unidad. “No se olviden de eso: Mientras estemos vivos, debemos amar lo más que se pueda. Valora cada minuto, cada segundo que la vida y Dios te regala. No importa cuál sea tu problema, de todas las opciones de soluciones, la mejor siempre va a ser el amor. La mejor siempre va a ser el amor. Pagar odio con odio genera odio. El amor atrae amor. Confía”. 

Cerró la noche con “LA MuDANZA» y una sorpresiva interpretación de “Chambea» en salsa.

“A los que se fueron un día de aquí de Puerto Rico soñando con volver y a los que todavía seguimos aquí: ¡NO ME QUIERO IR DE AQUÍ, SEGUIMOS AQUÍ!”.

Benito Antonio Martínez Ocasio, en el cierre del concierto 30 de la residencia No me quiero ir de aquí

Se viene el World Tour de Debí Tirar Más Fotos  

El lunes, ante un pueblo expectante, anunció “Una más”, una función adicional a su residencia, previo a su gira mundial DeBÍ TiRAR MáS TOToS, que inicia el 21 de noviembre en Santo Domingo, República Dominicana.

En su sexta gira mundial, el artista pasará por Costa Rica, México (con ocho funciones), Colombia, Perú, Chile, Argentina, Brasil, Australia, Japón, España (12 conciertos), Portugal, Alemania, Países Bajos, Reino Unido, Francia, Suecia, Polonia, Italia y Bélgica.